Diario Financiero 16 Mar 2022 POR MARÍA GABRIELA ARTEAGA
En tiempos de crisis, las compañías aseguradoras toman un rol más activo, considerando los cambios que las empresas y particulares tienen que realizar para adaptarse.
La llegada de la pandemia, hace ya dos años, es tan solo uno de los eventos que han generado un escenario empresarial sin precedentes tanto para las grandes compañías como para las PYME, profesionales y autónomos. En este particular, una situación excepcional que ha puesto a prueba los programas de seguros, y la eficacia de los planes de contingencia y continuidad de negocio de todos los actores de la economía.
“Las compañías están buscando abordar la salud física, la salud emocional, la salud financiera y obviamente cubrir la salud en general. Hoy, quieren una asesoría integral”, cuenta a DF Rafael Tagle, gerente para Chile y Perú de Willis Towers Watson (WTW), la tercera corredora de seguros más grande del mundo.
El ejecutivo afirma que la crisis sanitaria ha redibujado, en cierta forma, la industria. “En la actualidad, hay cada vez más demanda de consultoría y menos de ir a un mercado a buscar precios. Ello ha fortalecido mucho el área de la ingeniería de gestión de riesgo”, señala.
Es así como, como intermediarios entre las aseguradoras y los asegurados, se han visto en la necesidad de establecer prioridades estratégicas para poder dar respuesta a sus clientes.
Planes al alza
En el balance que hace Tagle sobre el impacto del Covid-19 en el sector, considerando que -por ejemplo- las enfermedades mentales derivadas de la pandemia han ido en aumento, sale a relucir el comportamiento en los precios de los planes para este año.
El jefe para Chile desde 2006 -y recientemente para Perú- estima que, si bien hay riesgos (políticos, sociales) que han quedado de lado y el mercado se ha ido normalizando en esas áreas, la salud va a seguir al alza.
“En la mayoría de los países de la región, los precios de la salud en ‘primera capa’ (que en Chile serían Fonasa o Isapres) van a subir. Y la explicación es sencilla: estamos acudiendo cada vez más a las citas médicas que no pudimos hacer en dos años, por la pandemia”, señala.
Y agrega: “A ello hay que sumar que, si bien ahora se están atendiendo afecciones más urgentes y particulares, a largo plazo se van a reactivar los chequeos periódicos”.
La fijación de precios en la industria va de la mano de la demanda y de la llamada “inflación médica”, que Tagle anticipa va a ser “importante” en 2022.
Esto quiere decir que, a mayor frecuencia de uso del servicio, mayor es el gasto en salud y, por ende, mayores serán los valores. “Los precios de los seguros de salud van a subir ajustándose a este mayor uso y creo que las compañías van a tener que enfrentarse a eso”, acota.
También prevé que las protecciones contra los ataques cibernéticos se incrementarán, a partir del boom de la digitalización. “Es un seguro muy demandado, que va a seguir subiendo de precio”, apunta.
Escenario en Chile
En el caso específico de Chile, que en el negocio de la salud funciona con diferencias frente al resto de la región, Tagle estima que el aumento podría verse específicamente en la modalidad de seguros complementarios y prevé modificaciones importantes al sistema por la propuesta que ha hecho, desde su campaña, el equipo del hoy Presidente Gabriel Boric.
“En Chile, individualmente nos cubrimos con el 7% y la compañía complementa. En el resto de los países, las empresas pagan esa primera capa. Ahora, no sé qué va a pasar con el plan único de salud que se va a implementar. Lo que sí está claro es que el mercado va a tener que ajustarse entre isapre y seguros”, señala.
Consultado por los riesgos políticos y sociales en el país, a raíz de lo vivido tras el estallido social de 2019, Tagle dice que “es difícil hacer proyecciones”.
Pero, destaca que ese ítem “ha bajado considerablemente, casi a niveles pre-octubre, porque en términos sociales, Chile está volviendo a lo que siempre fue”. “Todo depende de lo que pase ahora. El nuevo gobierno ha dado señales nombrando un ministro de Hacienda que da confianza, un quinto retiro con pocas probabilidades de que se haga efectivo y una pensión solidaria aprobada”, añade.
Estrategias 2022
Willis Towers Watson (WTW), fundada en 1828, llegó al año 2022 con un nuevo equipo directivo global, y una estrategia y visión renovadas tras la cancelación, en julio de 2021, de sus planes de combinación con su rival, Aon.
El gerente cuenta que la multinacional británica afronta hoy una nueva etapa marcada por tres prioridades estratégicas: crecer al mismo nivel o por encima del mercado en las áreas prioritarias; simplificar el negocio para aumentar la agilidad y la eficacia; y optimizar las plataformas globales para aprovechar sinergias.
Tiene, dice, tienen en sus planes seguir invirtiendo en innovación, especialmente en la mejora de las plataformas tecnológicas, a propósito del auge de la transformación digital.
“Invertimos mucho en desarrollo de robots que nos permitan automatizar el proceso y aprovechar todo este boom de digitalización que ha tenido el mercado”, relata.
Por ejemplo, desde Chile están “exportando” capacidad tecnológica y humana a Perú, “un país con el que compartimos necesidades similares, con muchos inversionistas chilenos en Perú y viceversa; hace todo el sentido ofrecer una atención integral”.
Además, la compañía está presente prácticamente en todos los países de América Latina, menos Ecuador y Paraguay.
“En la mayoría de los países de la región, los precios de la salud en ‘primera capa’ van a subir. Y la explicación es sencilla: estamos acudiendo cada vez más a las citas médicas que no pudimos en dos años, por la pandemia”.